¡Escribamos que algo queda!

Es válido y comprensible, de hecho parte de lo que nos habrá sucedido a todos en alguna experiencia pasada, que por situaciones sobrevenidas no podamos activar orgánicamente en cumplimiento de compromisos adquiridos, afectando en alguna medida el avance colectivo. Estoy convencido de que con la probabilidad de esta singular contradicción tenemos que convivir. No obstante, llama poderosamente la atención que siete cuadros revolucionarios integrantes de un colectivo que se propone transformador, evidencien un muy tímido avance en un proyecto caracterizado por el mismo colectivo como necesario y urgente. Considero que si se trata de que todos estamos muy ocupados en otros asuntos, sería incluso de provecho que así se manifieste en este foro, espacio que nos hemos dado de común acuerdo para el debate e intercambio de ideas y propuestas que sirvan de contribución a la construcción de una propuesta educativa transformadora como es la ACICP. Entonces, ¡Escribamos que algo queda!, parafraseando la consigna de Kotepa Delgado.

Por mi parte, he posteado algunas cosas. Se trata de sencillos aportes, en algunos casos referentes teóricos, en otros casos un esbozo de reflexión que aspira ser de mayor aliento, también alguna respuesta a un planteamiento hecho por uno de mis pares. Son algunas cosas, simples cosas. Trato de mantener el foro en movimiento con aportes que aspiro resulten útiles. Desde que fue publicado el foro, he reajustado mi agenda, para sentarme unas horas a generar intencionadamente aportes para el foro. Esa, creo, es la tarea que nos corresponde como promotores de este proyecto Comunidad de Conocimiento Libre ACICP y por allí anda el compromiso que nos planteamos asumir el 28 de noviembre.

Veamos esta aproximación a la autocrítica objetiva: cada vez que hice un aporte de los que he hecho en el foro hasta ahora, calculo haber invertido 1 hora en promedio para cada caso, lo cual sumaría unas 8 horas, quizás. Ahora bien, han transcurrido 22 días completos desde que fue publicado el foro y así se informó a todo el colectivo, eso se traduce en 528 horas disponibles en mi caso, pero siendo 7 cuadros que integramos el colectivo, esas 528 horas serían para el colectivo 3.696 horas. Entonces, 8 / 3.696 = 0,002165, significa que 0,22% del tiempo total que ha transcurrido para todo el colectivo desde la publicación del foro, es el que hemos invertido para aportar a la generación de conocimiento ACICP... es una estimación algo arbitraria, ¡claro!, disculpen -además- que no incorpore los aportes realizados hasta ahora por Arquímedes y Alexis, pues no conozco los datos. También ofrezco excusas por utilizar esta perspectiva cuantitativa tan odiosa, pero sin pretender ser eficientista, creo que tendríamos que plantearnos el cumplimiento de los compromisos considerando todas la variables y el tiempo es una de ellas. A partir de esto, podríamos incluso asomar indicadores de efectividad, que también serán necesarios utilizar en algún momento. El ejercicio revolucionario no está reñido con el rigor científico, todo lo contrario. En medio de todo esto, seguro coincidimos en que el conocimiento ACICP no surgirá por  generación espontánea o caerá del cielo por providencia divina… ¡esta es una travesura sarcástica!. Nos corresponde entonces, a nosotros siete, de manera consciente y entusiasta, reflexionar y generar algún tipo de producción intelectual que contribuya a enriquecer la experiencia.

Evaluémonos compañeros, definamos si estamos en real disposición de echar para adelante esta Comunidad de Conocimiento. Tratemos de hacer de esta experiencia algo que jamás hemos hecho antes, algo realmente sólido, orgánico y poderoso: la Comunidad de Conocimiento Libre ACICP.

Sinceramente espero que esta reflexión sirva como contribución para una necesaria sistematización de esta experiencia de organizar y echar a andar una Comunidad de Conocimiento. Procuremos que no sólo nuestra práctica -hasta ahora muy tímida- defina el destino de esta Comunidad de Conocimiento recién nacida, que tampoco lo definan nuestros pensares, que de la abstracción incontenible troca a veces en un idealismo pernicioso. Permitamos, por favor, que también nuestros sentires nutran la reflexión para evitar lo que muchas veces nos ha sucedido: la extinción de una grandiosa iniciativa.

¡Un abrazo!

Es fundamental que hagamos de esta Comunidad de Conocimiento, la plataforma política para validar y promover filosofalmente y científicamente la ACICP como estrategia para construir la Sociedad Justa y amante de la Paz; pero además necesitamos posicionar nacional e internacionalmente una Metodología andragógica y pedagógica de ser necesario, para evolucionar el constructivismo social, ahora con un sujeto específico: la clase trabajadora o el pueblo trabajador.